Una mañana en la terminal de ómnibus de Río de Janeiro pensaba...
estoy en peligro de extinción ¡llorando en la terminal de Río! me colgaré un cartel que diga BIENVENIDOS A CABO FRÍO-- BIENVENIDOS A CABO DE MIEDO- BIENVENIDOS A CABO XXXXXX-- los pasajeros entrantes y salientes son mi espejo pues sólo entro y salgo de lo que veo, se llama DESAPRENSIÓN.
GRACIAS POR VISITAR RÍO FRÍO-- Aquí vivió mi sombra al fondo de una arrocería Marcopolo, en total seguridad. Mi vida. Errores perpetuos, tendiendo a estar equivocada y tendiendo a estar equivocada. Esta idea tomó forma en mí cuando salió el último micro al prohibido Reino de BUZIOS. Donde se dice está enterrado el anillo que...la luz...tu mente...los años noventa...llorarás y tendrás memoria...
No hay comentarios:
Publicar un comentario